lunes, 7 de septiembre de 2009

EL BARROCO

El barroco es el movimiento cultural y artístico de la Contrarreforma. Surge en los siglos XVIII y XIX, en Italia y de ahí se expande hacia el resto de países de Europa y sus colonias en América. Entre sus características se encuentra la irracionalidad, la desmesura siempre para lograr piezas sobrecargadas o recargadas. Por esto durante el Siglo XVIII y hasta finales del siglo XIX, las obras barrocas fueron condenadas por su afectado platonismo, su concepto de arte noble, limitado a la reproducción de la belleza ideal, chocando con la entrega apasionada a la realidad, con su ilusionismo pictórico y su patetismo religioso; el barroco fue revalorado a finales del Siglo XIX por Jacob Burckhardt, Benedetto Croce y Eugenio d’Ors.
La pintura barroca española se caracterizo por penetrar en otro aspecto típicamente expresivo de la estética del retrato, considerado una culminación de esta dirección estética. El movimiento además de la pintura abarca a la arquitectura, cuyos principales representantes son: Bernini y Borromini; la literatura con Luis de Góngora y Francisco de Quevedo en España y Juan Ruiz de Alarcón y Sor Juana Inés de la Cruz en México; la música con Johann Sebastian Bach y Antonio Lucio Vivaldi; la ya mencionada pintura con Caravaggio y los Carracci; y la danza, además se ubica Leibniz, un filosofo verdaderamente representativo de la época barroca.
El barroco es un movimiento que se ubica entre el renacimiento y el Neoclásico, justo cuando muchos movimientos revolucionarios culturales produjeron una nueva ciencia y religión distante del catolicismo, el movimiento Protestante, por lo cual la Iglesia fue un elemento que influyó fuertemente la corriente, por ejemplo, la pintura española del Siglo XVIII expresa una profunda religiosidad humana y la esencia de la religiosidad de la Contrarreforma. Así que es en España donde el arte aparece como una función religiosa.El barroco es, entonces, una reacción contra la tiranía artística del ideal estético italiano, es decir, el Renacimiento, fuertemente apoyado por la Iglesia caracterizándose por el adorno excesivo.

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